Curando el stress y la obesidad con amor

La vida moderna ha elevado nuestros niveles de estrés a cifras exhorbitantes.

Hoy en día existe la ilusión de la cercanía geográfica. Pero muchas veces, para  ver a nuestros seres queridos y estar con la familia, tener su apoyo, tenemos que tomar un avión que nos acerque a ellos. El número de familias monoparentales está aumentando y eso resulta ser una situación estresante y se acentúa por la extinción gradual del grupo familiar amplio. Los avances tecnológicos también aumentan nuestro grado de inquietud: las armas de destrucción masiva, los residuos nucleares, el calentamiento global, la contaminación…

A todo esto se suma la sobrecarga de tareas.

Se sabe que cuando  percibimos un peligro (real o imaginario), el Hipotálamo (situado en el cerebro) segrega la hormona liberadora de Corticotropina (CRH). La CRH estimula la glándula pituitaria para que libere la Adrenocorticotropina (ACTH), que hace que las glándulas suprarenales segreguen otras 3 hormonas: la Adrenalina, la Noradrenalina y y el Cortizol.

El circuito completo de liberación de hormonas y sustancias químicas se llama: Eje Hipotalámico-pituitario-adrenal (HPA). Si el eje HPA está activado a largo plazo, provoca enfermedades físicas y psicológicas como:

• Úlceras.
• Problemas cardíacos.
• Debilitación del sistema inmunológico.
• Ansiedad.
• Depresión.
• Colesterol.
• Obesidad.

Está comprobado que los niveles altos de Cortisol incrementan el apetito, por lo cual pueden producir Obesidad. La secreción prolongada de Cortisol puede aumentar la producción de Insulina (potente estimulante del apetito), que a su vez, provoca un mayor almacenamiento de grasa, sobre todo alrededor de la cintura.

Los estudios han demostrado que las mujeres con vidas más estresadas tienden a almacenar grasa en el abdomen. Es interesante saber que las células grasas de la parte interna de la cintura son ricas en receptores de las hormonas relacionadas con el estrés. Estos estudios demuestran que la grasa abdominal está relacionada con un riesgo alto de padecer un infarto de miocardio.

Vivimos en un mundo avaricioso, violento, lleno de odio…

Resulta difícil amar de una forma incondicional…

Pero se sabe que el Amor es el antídoto del estrés. La idea de que las personas enamoradas enferman con menor frecuencia no es sólo un mito. Son personas más felices, más optimistas y los factores causantes de estrés del entorno y de la vida no les preocupa tanto. Eliminar los bloqueos y los obstáculos que nos impide alcanzar un estado de paz interior, amar y practicar regularmente la meditación nos ayuda a tener resultados profundos y duraderos.